Arévalo García Vielma, un artista venezolano contemporáneo, se embarcó en un viaje transformador que lo llevó del ámbito de la ingeniería al vibrante mundo del arte. Inicialmente cursó estudios en la escuela de ingeniería con la intención de convertirse en ingeniero civil, pero pronto descubrió que su verdadera pasión residía en la práctica del arte. Tomando una decisión trascendental, cambió de rumbo y se matriculó en la Escuela de Artes Plásticas de la Facultad Experimental de Arte de la Universidad del Zulia, con la especialidad de dibujo.
Durante su paso por la universidad, la expresión artística de Arévalo experimentó una importante evolución. Profundizó en la abstracción, utilizando técnicas de montaje para crear composiciones inspiradas en los paisajes industriales de su ciudad natal. Estas obras, caracterizadas por el uso de objetos encontrados y artefactos de complejos industriales, sirvieron como reflejo del contexto rico en petróleo de su entorno. A pesar de su naturaleza abstracta, conservaron elementos del patrimonio cultural del lago de Maracaibo, entrelazando temas de pesca, palafitos, manglares y más con imágenes industriales.
A medida que avanzaban sus años universitarios, Arévalo se embarcó en una exploración paralela del arte figurativo, inspirándose en la filosofía para informar su proceso creativo. Este cambio hacia la expresión figurativa marcó un nuevo capítulo en su trayectoria artística, que continúa evolucionando y expandiéndose para abarcar el dibujo, la pintura, la escultura, la cerámica y el grabado.
Hoy en día, las últimas obras de Arévalo García Vielma representan una síntesis de sus exploraciones artísticas, combinando elementos de abstracción y figuración para crear un rico tapiz de expresión. A través de su diversa gama de medios, busca transmitir no sólo su visión personal sino también la intrincada interacción entre lo antiguo y lo industrial, lo abstracto y lo figurativo, invitando a los espectadores a profundizar en las complejidades de su narrativa artística.